Mañana se celebra, un año más, el Día Europeo del Enoturismo, una edición en la que participan 70 territorios muy vinculados a la cultura vitivinícola y a la que, por primera vez, se han unido zonas productoras de Argentina, Uruguay y Estados Unidos.
Así lo ha explicado la secretaria general de la Red Europea de Ciudades del Vino (Recevin), Carme Ribes, quien destaca la variedad de la oferta para los enoturistas en un fin de semana en el que muchas bodegas abren sus puertas para enseñar la esencia de sus productos a los visitantes.
Los «Caminos del Vino» de Argentina, rutas uruguayas y distintas zonas productoras de Estados Unidos, donde esta actividad se regula a través de la organización estatal, son los nuevos aliados al otro lado del Atlántico.
«El enoturista busca emociones y adentrarse en la cultura del vino», ha precisado Ribes, un objetivo con el que trabajan todos los territorios, cada uno con su peculiaridad.
En su opinión, este segmento turístico sigue una «tendencia al alza», si bien se han vivido retrocesos en algunos de los territorios, que no considera «mal presagio».
Entre los desafíos, cita aumentar la visitas, prolongar las estancias y que los turistas compren vino, pues «de lo mejor que tiene el enoturismo es la posibilidad de aproximar el producto al consumidor final, una vez que ha conocido el cariño y el mimo con el que se ha trabajado».
Una degustación de paella, sangría o quesos, y jornadas benéficas son algunos de los dieciocho actos previstos en EE UU para acercar a sus visitantes al mundo del vino en este Día del Enoturismo.
Ya en Europa, participan imaginativas propuestas rutas del vino de Bulgaria, Grecia, Italia, Portugal, Francia y España.
Así, desde Francia proponen una acercamiento a la cultura de su afamado «cognac», mientras que la portuguesa ruta de los vinos del Tejo ha programado un maridaje especial entre licores y castañas, y en la región del Veneto (Italia), habrá una cena-maridaje.
En España, las dos rutas más visitadas son el Penedès y Jerez, porque comenzaron antes su andadura enoturística, están geográficamente cerca de núcleos urbanos importantes y cuentan con empresas que son en sí mismas reclamos turísticos, ha detallado.
Aún así, advierte de que hay territorios que, «aunque van más lentos», tienen una evolución «bastante apreciable».
En esta ocasión, el Penedès ha preparado actividades muy enfocadas al público familiar, como «Las Burbujas del Cava», con una cata comentada para los adultos y para los pequeños, juegos y experimentos con los que conocer cómo se forman las burbujas de este producto.
Jerez, que este año cuenta con el galardón de «Ciudad Europea del Vino 2014» que otorga Recevin, celebrará este día por todo lo alto con un programa que arranca el jueves: la Ruta de la Tapa «Rebáñame otra vez», espectáculos de caballos o de flamenco, paseos en todoterreno por las viñas, ciclos de conferencias y actividades para los niños son algunas de las más destacadas.
En El Puerto de Santa María comenzó el lunes la II Ruta del Mosto, y a final de mes las XIX Jornadas del Vino Fino; también en Andalucía, en Montilla (Córdoba), el sábado habrá, entre otros actos, una nueva marcha cicloturista para conmemorar el Día.
En Rueda son muchas las bodegas que se han unido a la celebración, y el Cortijo de Los Expolios, una finca ganadera dedicada al ganado bravo y equino, abre sus puertas para realizar una visita guiada por sus instalaciones, a las que se sumará una degustación y la entrada a su museo taurino.
En Extremadura, la Ribera del Guadiana ha preparado un autobús para que los enoturistas disfruten con tranquilidad de sus paisajes y ha organizado el primer festival de flamenco y vino.
Propuestas para todos los gustos y en muchos rincones del mundo con un único objetivo, que el viajero disfrute de la cultura del vino en toda su esencia, desde el campo a la copa.
También participan la Ruta del Vino Ribera del Duero, Rias Baixas y de las Denominaciones de Origen de Cigales, Costes del Segre, Utiel-Requena y Málaga. EFE