El Gobierno ruso anunció ayer la exclusión de varios productos de la vasta lista de alimentos que prohibió importar desde la Unión Europea, Estados Unidos, Canadá y otros países que han impuesto sanciones contra Rusia por su implicación en la crisis ucraniana.
Según la disposición del Ejecutivo, se levanta el veto a la importación de leche y productos lácteos sin lactosa, patatas, cebolla, maíz híbrido dulce y guisantes -todas estas hortalizas para siembra-, alevines de salmón y trucha, suplementos alimenticios y complejos vitamínicos.
La semana pasada, el viceprimer ministro ruso, Arkadi Dvorkóvich, adelantó que se modificaría la lista de productos prohibidos por el impacto que su ausencia en el mercado tendría para la población.
El presidente ruso, Vladímir Putin, ha defendido la prohibición de las importaciones occidentales introducida el pasado día 7 de agosto en respuesta a la sanciones contra Moscú.
Putin admitió que hace cuatro años el país no podía introducir un embargo a los alimentos occidentales, ya que los productores rusos no estaban preparados.
«Hace diez años importábamos de EEUU 360.000 toneladas de carne de pollo. Los llamaban ‘los muslos de Bush’. El pasado año fueron sólo 200.000», señaló en una reunión con parlamentarios. EFE